Los avances analíticos esto ha llevado a la adopción de los mencionados avances en técnicas analíticas, gracias a la aliada tecnologías y a su gran avance, como herramientas aceptadas dentro de los laboratorios modernos. La tendencia, entonces, por el químico medicinal de todos modos, ha sido para 'simplemente pescar el producto', un enfoque que ha ayudado a cumplir objetivos, pero que invariablemente dejó al químico de proceso con un gran desafio.
Con diferentes objetivos e igualmente divergentes enfoques de síntesis, esta relación de la diferencia entre química y proceso de investigación, está establecido tanto como se acepta.
Estos dos mundos, sin embargo, han tendido a quedar en la tierra de nadie y vagamente definidas que dependen de las grandes farmaceuticas para producir las cantidades de kilogramo, gramo o múltiplos de estos y se requieren para la experimentación con animales inicial. Con el tiempo a una prima es la habilidad especial de esta especie de farmacia para llevar a cabo lo imposible: cerrar la brecha entre el pragmatismo creativo de la química medicinal y la artesanía ingeniosa de la química del proceso.
Cada vez más, estos grupos están implementando un flujo de trabajo de química como técnica que permite optimizar rápidamente una síntesis y, sin recurrir a escalar, usar estas mismas condiciones de reacción para producir las cantidades requeridas de varios kilos de material. Las propiedades inherentes del flujo de trabajo permiten una síntesis rápida y eficiente bajo condiciones de reacciones controladas.
Fundamentalmente, el proceso sintético es diferente a la de un reactor discontinuo.
Los reactivos y los productos sólo necesitan estar expuestos a conjuntos particulares de condiciones de reacción durante el tiempo que la cinética de una demanda particular de la reacción. En consecuencia, temas como a partir de materiales y productos de degradación, debido por ejemplo a la inestabilidad térmica, pueden ser superados, además de una sintetizacion eficiente que conduce a un mayor rendimiento y más.
El control inherente sobre las condiciones de reacción: la tasa de flujo (tiempo de reacción), la estequiometría y la temperatura, pueden todos ser mediado por software impulsado por sistemas como el reactor de flujo de Syrris África.
Las reacciones que están optimizadas en una pequeña escala en reactores basados en el chip pueden ser 'escalados' simplemente cambiando a un Reactor de tubo.
La química también puede acelerarse por denominados 'súper calentamientos': una técnica por el que la reacción se calienta bajo presión permite resultados análogos a la química de microondas.
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